Hoy es posible utilizar los propios recursos del cuerpo humano para curarse a sí mismo, principio sobre el que se basa la tecnología del PRGF, plasma rico en factores de crecimiento. Podemos aislar, concentrar y extraer los factores de crecimiento de nuestra sangre para reparar los tejidos de forma natural.

Los factores de crecimiento permiten:

• Acelerar el proceso de cicatrización

• Reducir la inflamación

• Reducir el riesgo de infecciones

• Disminuir el dolor.

En Odontología el PRGF nos ayuda a resolver diferentes y complejas situaciones clínicas, desde reducir el tiempo de integración de los implantes en el hueso hasta recuperar hueso después de una extracción dentaria o en un defecto óseo e incluso mejorar la situación de pacientes periodontales.